sábado, septiembre 29, 2007

Las malditas manchas

En general hay que reconocer que los tíos nos manchamos más. Yo siempre digo que es que hacemos más cosas. Mariví es que en cuanto se vestía con ropa de calle ya no hacía nada por si acaso. ¿Y hay algo más ortopédico que una tía vestida de boda? Intenta abrazar a tu chica justo antes de salir de casa a una boda y verás.

En fin, que desde que no estoy con ninguna de ellas no sabía muy bien qué hacer con esos pequeños lamparones de las corbatas, con las manchitas de grasa en los pantalones, etc. Sí, claro, siempre queda lo de llevar todo a la tintorería pero son muchos viajes y una pasta y, además, la chica de la tintorería ya empezaba a decirme cosas como "¿esta chaqueta le merece la pena limpiarla?" por mi chaqueta favorita de siempre, la más cómoda.

Lo que más me caen son manchas de comida en las corbatas, muchas veces de grasa. ¿Cómo lo resuelvo ahora? Pues sobre todo, no las lavo: la seda no se puede lavar. No le quito la mancha con un paño húmedo o una toallita quitamanchas, que queda cerquillo. Uso Cebralín, siempre. Es un quitamanchas en spray que hay que saber utilizar bien. Es importante seguir las instrucciones si quieres que quede perfecto: agita con energía antes de usar y pulveriza a veinte centímetros de distancia (y mide los veinte centímetros si hace falta, que en cuestión de medidas estamos muy acostumbrados a exagerar).

Nunca quites una mancha de grasa sólo con agua, no serviría de nada. Si no es seda y se puede lavar, necesita un poquito de jabón con agua tibia.

Si la mancha es de tinta, antes de que seque mete la prenda en leche. Si ya está seca, hay algunas tintas que salen con alcohol.

No uses lejía excepto en prendas blancas y en caso de extrema necesidad porque si son de algodón, bien, pero sino después amarillean y, en todo caso, se rompen antes. Eso sí, es la única manera que conozco de quitar manchas de fruta.

Si se trata de pintura porque te has puesto a hacer el manitas con la camisa de salir, aparte de que "ella" te va a meter una bronca de colores, inténtalo con aguarrás, pero ojo, quizá te quedés igual sin camisa pero de perdidos al río.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Llevo un buen rato leyendo el blog el cual encontré buscando sobre como planchar una camisa jajaja. Me ha encantado tu blog, no lo dejes.

Un saludo!

Luis García dijo...

Gracias, siempre animan estos comentarios para seguir.

Angelillo dijo...

Para las corbatas yo uso un doble método: combino el tuyo del cebralín con el cepillo de dientes eléctrico para cepillar y extender el cebralín. Luego paso la corbata levemente por la ducha y la dejo secar (así no hace cerco).
Tintorería jamás, ya probé y me devolvieron la corbata y la mancha. Están para lo fácil, pero para esto estoy yo también.